Tras meses de incertidumbre, de planes truncados, de planillas de entrenamiento guardadas en viejas carpetas, después de todo ello, por fin, ha llegado la hora de desempolvar nuestro material porque ya está de nuevo en marcha nuestra Escuela Villa de Aranjuez.
Desde que, allá por marzo de 2020, la pandemia provocada por esta cruel enfermedad llamada COVID-19, nos obligara a cerrar las puertas de nuestra escuela de basket, la buena tendencia epidemiológica, y sobre todo las enormes ganas de volver y reencontrarnos con nuestros pequeños babylinces, todo ello ha conseguido que las puertas se vuelvan a abrir una vez más.
Siempre hemos sido fieles y hemos defendido que el deporte no podía parar; que el deporte no es el problema, sino la solución; que los datos avalaban nuestra apuesta por un deporte seguro y nos daban la razón. No ha habido contagios provocados por la práctica del baloncesto en nuestras canchas, ni tenemos constancia que así haya ocurrido en otras instalaciones dentro de la Comunidad de Madrid. Las medidas de seguridad han sido, y siguen siendo, una barrera que ha permitido continuar con la práctica de un deporte que ha servido para que nuestros chicos y chicas pudieran rescatar con un mínimo de su vida anterior despues de tanta locura, dolor, y esfuerzo de nuestra sociedad.
Ojalá este comienzo de año sea el comienzo del final de esta pesadilla, donde la práctica de nuestro deporte nos ha servido para evadirnos de la difícil situación, y recuperar parte de ese mundo donde tan felices nos hemos sentido.
Así pues, REGRESAMOS, y no sólo con el comienzo de nuestros equipos federados en competición oficial, sino que volvemos de la mano de nuestros peques. Aquellos que todavía no acaban de entender por qué se les ha arrebatado esos preciosos minutos enganchados a un balón en compañía de sus viejos y nuevos amigos, con los que solían compartir una misma ilusión, y su pasión por este deporte.
Hoy lunes, a las 17:00, el polideportivo municipal Agustín Marañón volverá a rugir, como rugen los cachorros babylinces cuando tiene hambre,... hambre de baloncesto ;-)